Minuciosa investigación de Kathleen McAuliffe, periodista especializada en temas científicos, sobre los últimos descubrimientos acerca de los parásitos y otros microorganismos que influyen en cómo actuamos, sentimos y pensamos.
Los seres humanos en absoluto somos inmunes a la profunda influencia de los parásitos.
Por ejemplo, los microbios en nuestro intestino influyen en nuestras emociones y en el mismo funcionamiento del cerebro. Y los gérmenes provocadores de resfriados o gripes son capaces de modificar nuestra conducta, incluso antes de la aparición de síntomas visibles.
Hay fuertes indicios de que los organismos transmitidos por nuestros propios animales de compañía modifican los rasgos de nuestra personalidad y son causantes de comportamientos irreflexivos e impulsivos.
Muchas enfermedades mentales, incluso la esquizofrenia pueden tener su origen en los parásitos.
De forma directa o indirecta, los parásitos manipulan cómo pensamos, sentimos y actuamos.