Finalizado el verano, septiembre es un momento de reinicio, de renovar objetivos y de definir retos para el nuevo curso. Si eres un pequeño ahorrador o inversor, uno de esos objetivos será tratar de conseguir el mejor rendimiento de tus ahorros. Y esto, sin duda, será también un reto, pues desde el punto de vista financiero nos enfrentamos a un otoño realmente incierto. Por ello, es importante tener clara la estrategia que vamos a seguir para proteger nuestro patrimonio.

La plataforma europea de inversión Scalable Capital ha identificado cuatro aspectos clave que no debes perder de vista en los próximos meses, pues su conocimiento te ayudará a tomar buenas decisiones en lo que respecta a tus ahorros. Toma nota.

Crisis energética, cómo afectará a nuestras inversiones y cómo protegernos de ella

La situación que vivimos desde el punto de vista energético, agravada por la crisis en Ucrania, podría llevar al ahorrador a pensar que prefiere mantener su dinero en la cuenta bancaria, en previsión de la subida de las facturas. Ciertamente, es recomendable mantener un colchón de ahorro equivalente a dos o tres salarios como fondo de emergencia, pero el resto es preferible destinarlo a la inversión para tratar de conseguir mayor rentabilidad, estableciendo una rutina de ahorro que podemos adaptar a nuestras necesidades.

La clave está en definir un plan de inversión orientado al largo plazo, pero con la flexibilidad que nos permita retirarlo en cualquier momento si necesitamos liquidez, y la diversificación suficiente para equilibrar la volatilidad de determinados activos y la incertidumbre de los mercados. En este contexto, una buena alternativa podría ser la inversión en ETF que apoyan las energías renovables.

Cuando los precios suben y disponemos de menos dinero para ahorrar, aumenta la importancia de gestionar de forma más inteligente nuestras inversiones y proteger nuestro patrimonio. Actualmente existen plataformas digitales de inversión que se apoyan en la tecnología para ofrecer a los pequeños inversores un servicio de calidad y sin elevadas comisiones, orientándoles en la toma de decisiones y facilitando la escalabilidad de sus inversiones.

Inflación, qué podemos esperar y cómo preservar nuestro patrimonio

Teniendo en cuenta tasas de inflación del 4-5%, dentro de 12 años el valor real de nuestro dinero en la cuenta bancaria se habrá reducido a la mitad. Es decir, la pérdida de poder adquisitivo a lo largo de los años es considerable. Por ello, en tiempos de elevada inflación como los actuales (la tasa de variación anual del IPC en España en agosto de 2022 ha sido del 10,4%), ahorrar ya no puede significar simplemente dejar el dinero en la cuenta corriente. Es necesario pasar a la acción, invertir es la nueva forma de ahorrar, y la rentabilidad está en el largo plazo.

Por ejemplo, la rentabilidad media anualizada de un ETF MSCI World en los 10 últimos años (entre junio de 2012 y junio de 2022) fue superior al 10%, y sobrepasa también ese porcentaje si tomamos como referencia el periodo entre diciembre de 1978 y junio de 2022.

No existe una alternativa de inversión a medio plazo en los mercados de capitales para acumular riqueza y cuidar el bienestar financiero. Y la inflación acaba de añadir un sentido de urgencia a este asunto: es esencial mantener una estrategia de inversión a largo plazo y bien diversificada para evitar que el dinero que tanto nos cuesta ganar se vea mermado por la pérdida de poder adquisitivo.

ETF, qué son y por qué son una buena oportunidad de inversión

Los ETF son fondos de inversión cotizados (Exchange Traded Funds), y hoy día son la herramienta más poderosa para diversificar las inversiones de forma rentable. Su objetivo es replicar la rentabilidad de un índice, y permiten invertir de forma flexible en casi todos los activos, países y sectores. Por ejemplo, con un plan de inversión en un ETF que tome como referencia el índice MSCI World, el inversor tendrá cubiertas más de 1.500 acciones de distintos sectores y regiones.

Las participaciones subyacentes de los ETF son divulgadas de forma transparente por los emisores, lo que significa que los inversores siempre conocen y tienen control sobre los activos que han comprado. Además, no tienen que pagar comisiones al gestor del fondo activo.

Hoy día, el mercado de ETF es especialmente popular entre muchos inversores particulares y pequeños ahorradores con escasos conocimientos financieros, debido a las bajas barreras de entrada y a la buena relación riesgo-rentabilidad a largo plazo. De hecho, van camino de convertirse en un fenómeno de masas, pues cada vez más personas se dan cuenta de que necesitan acumular activos para asegurar su jubilación y recurren para ello a este vehículo de inversión.

Criptomonedas, por qué son tendencia. ¿Es buen momento para invertir en ellas?

Las criptodivisas están experimentando una aceptación cada vez mayor, y a pesar de su volatilidad se han consolidado como un tipo de activos con presencia estable, aunque en pequeñas cantidades, en una cartera equilibrada y diversificada entre los inversores privados, sobre todo entre los más jóvenes.

No hay duda de que estos activos han llegado para quedarse. En octubre de 2021, el Banco de España creó un registro de proveedores de servicios de criptomonedas en el que se han inscrito ya más de 20 empresas procedentes de países como Alemania, Países Bajos, Austria y también España.

El hecho de que sean activos volátiles no significa que tengamos que hacer concesiones en lo que respecta a la seguridad. Existe una forma segura de invertir en criptomonedas mediante infraestructuras ETP, que son productos negociados en bolsa (Exchange Traded Products) que permiten comprar pequeñas fracciones y negociarlas como si fueran acciones o ETF en centros de negociación europeos regulados.

En definitiva, invertir a través de plataformas que simplifiquen la toma de decisiones, siempre con la vista puesta en el largo plazo, con una cartera bien diversificada y utilizando vehículos de inversión que  manejen bien el binomio riesgo-rentabilidad nos ayudará a proteger nuestro patrimonio ante un otoño incierto para los mercados.