Una encuesta de NordVPN mostró que los españoles pasan más de seis horas a la semana en las redes sociales. Sin embargo, a casi la mitad de ellos (45%) les preocupa que los gigantes de las redes sociales los rastreen online, siendo Facebook (74%), WhatsApp (52%) e Instagram (44%) los que llevan la delantera.

Dado que el 87% de la población española utiliza las redes sociales, podemos deducir que es una actividad placentera, pero si la gente publica regularmente información personal allí, los hackers pueden utilizar esa información en su contra, creando una pesadilla de privacidad.

“A medida que se publica más información online, aumenta el peligro de que los intrusos malintencionados extraigan sus datos de forma que vulneran la privacidad personal de las personas. Al utilizar las redes sociales, no solo sacrificas tu privacidad, sino que te expones al robo de identidad, al marketing falso y al ciberacoso, y aumentas tus posibilidades de convertirte en víctima de la ingeniería social o de un depredador online”, afirma Daniel Markuson, experto en privacidad digital de NordVPN.

Markuson comparte los problemas de privacidad y seguridad más comunes en las redes sociales a los que los usuarios españoles deben prestar atención:

  1. La extracción de datos. Información como la dirección de correo electrónico, el nombre, el día de nacimiento, los gustos o incluso el lugar de residencia son valiosos para las plataformas de redes sociales. Una vez que cedes voluntariamente los datos al aceptar los términos y condiciones de una plataforma, estos te pertenecen. Puede compartir estos datos con sus socios, venderlos a terceros o incluso transferir tus datos a países con leyes de privacidad menos favorables para los usuarios (más información sobre la política de privacidad de Meta aquí). Cabe destacar que solo el 32% de los usuarios españoles lee las condiciones de servicio de las aplicaciones.
  2. Configuración de la ubicación. Presta atención a la configuración de la ubicación cuando utilices sitios y apps de redes sociales. Algunas pueden rastrear tu paradero incluso cuando les has dicho que no lo hagan. Además, algunas apps rastrean tu ubicación incluso después de que la hayas desactivado; por eso Google fue demandado por abogados de Arizona hace unos años.
  3. Ingeniería social. Desde tus cuentas de redes sociales, especialmente Facebook, los hackers pueden obtener información sobre ti y utilizar ataques de ingeniería social como phishing, whaling, baiting o pretexting para hackearte. También pueden utilizar su información para hacerse pasar por ti o incluso robar tu identidad. El reciente hackeo de Uber es un gran ejemplo del obstinado poder de la ingeniería social.
  4. Acoso, ciberacoso y suplantación de identidad. Las redes sociales también pueden utilizarse para el ciberacoso. Esto puede incluir el envío de mensajes de texto o correos electrónicos malintencionados, la publicación de mensajes hirientes en las redes sociales o la difusión de rumores online. Según Comparitech, el 60% de los padres declaran que sus hijos sufren acoso, y el 19,2% afirma que el acoso se produce a través de las redes sociales y las apps.
  5. Información falsa. Los medios de comunicación social se utilizan a menudo para difundir información errónea: es un arma poderosa en el contexto de los problemas actuales. Según Statista, Covid-19 parece ser el tema más común de la información falsa o engañosa en todo el mundo, y el 74% de los usuarios de los medios sociales de Estados Unidos vieron contenido etiquetado como falso.

“Para proteger tu privacidad en las redes sociales, no compartas en exceso: proporciona solo la información necesaria. Además, utiliza contraseñas seguras, no uses siempre las mismas y no utilices las redes sociales en dispositivos públicos. La gente también debería desactivar los datos de geolocalización en sus aplicaciones y configurar la autenticación de dos factores cuando sea posible”, afirma Daniel Markuson de NordVPN.